Ambos cepillos pueden ser efectivos si se usan correctamente, pero el cepillo eléctrico tiene una ligera ventaja en términos de eliminación de placa bacteriana y reducción de problemas como la gingivitis.

El cepillo eléctrico realiza un movimiento constante y controlado, lo que permite una limpieza más eficiente sin necesidad de aplicar demasiada presión. Muchas personas no tienen la técnica adecuada con el cepillo manual, lo que puede llevar a una limpieza deficiente o, por el contrario, a un cepillado agresivo que puede desgastar el esmalte y afectar las encías.

Cada vez más gente usa cepillo eléctrico, y ahora salen modelos de IA capaces de decirte qué zona necesita más cepillado. ¿Qué te parece? ¿Son adelantos positivos o debemos volver al de toda la vida?

Los avances tecnológicos en odontología siempre son bienvenidos si contribuyen a mejorar la higiene bucal y a facilitar la rutina del paciente. Los cepillos eléctricos con inteligencia artificial pueden ser útiles para quienes tienen dificultades para cepillarse correctamente, ya que ofrecen un feedback inmediato sobre qué áreas necesitan más atención. Sin embargo, no podemos depender únicamente de la tecnología; la clave sigue siendo la educación en higiene oral y el desarrollo de buenos hábitos desde la infancia.

¿Con ambos cepillos la forma de lavarse los dientes es la misma?

No exactamente. Con el cepillo manual, se recomienda hacer movimientos circulares o de arriba hacia abajo, sin ejercer demasiada presión. Con el cepillo eléctrico, el movimiento ya lo realiza el dispositivo, por lo que solo es necesario guiarlo suavemente de diente en diente, sin frotar.

¿Cuál es la forma correcta de cepillarse los dientes?

  1. Posición del cepillo:coloca el cepillo en un ángulo de 45° respecto a la línea de las encías.
  2. Movimientos:
  • Con cepillo manual: realiza movimientos circulares y cortos sin ejercer demasiada presión.
  • Con cepillo eléctrico: desliza lentamente el cepillo por cada diente, dejando que haga su trabajo sin moverlo bruscamente.

«El cepillo eléctrico realiza un movimiento constante y controlado, lo que permite una limpieza más eficiente sin necesidad de aplicar demasiada presión”

  1. Tiempo: dedica al menos 2 minutos, asegurándote de limpiar todas las superficies de los dientes: externas, internas y de masticación.
  2. Lengua: no olvides cepillar la lengua para reducir las bacterias y evitar el mal aliento.
  3. Frecuencia: cepillarse mínimo dos veces al día, preferiblemente después de cada comida.

En Clínica 4Ces, siempre recomendamos a nuestros pacientes que elijan el cepillo con el que se sientan más cómodos, pero, sobre todo, que mantengan una buena técnica y constancia en su higiene oral.